Arturo Vidal rompió el silencio sobre su situación económica. Días atrás, trascendió que el «King» no estaba pasando por un buen momento financiero, por lo que habría puesto en venta su haras.
Aburrido de los «inventos (como él afirma) de la prensa», el mediocampista del Athletico Paranaense habla desde hace semanas a través de Twitch, plataforma que varios jugadores hoy utilizan para hacer descargos.
«No sé cómo lo hacen que tiran cosas y le achuntan o inventan. Uno queda loco, le ponen cifras. El haras es algo que siempre soñé con tener. Lleva cinco o seis años, me ha costado mucho tenerlo, tener y criar mis caballos», dijo el «Rey» Arturo en una de sus últimas transmisiones.
En esa línea, complementó: «llega un momento en que me llega a la cabeza, estoy en lo último de mi carrera como futbolista. En estos cinco o seis años he ido máximo siete veces. Me he gastado toda la plata del mundo tratando de cumplir mi sueño. Me aburrí de la hípica porque vi cosas que no me gustaron. Lo veía como un hobby, pero ya no le estoy dando la importancia que me gustaría».
Las nuevas prioridades de Arturo Vidal
Pese a que es sabido del amor y pasión que el volante de La Roja tiene por los caballos, fue el mismo quien confesó que no ha podido disfrutar de los frutos que este negocio le ha dado, sumado a que ha visto cosas que no le gustan en la hípica.
Por ello, el «King» tiene nuevas aspiraciones: «Quiero ser entrenador, tengo mi gimnasio, estoy metiendo plata para agrandarlo. Quiero meterme con otras cosas para achicar todo lo grande que tengo. La hípica me decepcionó y la gente que está metida ahí sabe. No quiero seguir, pero no he dicho que lo quiero vender».
Revisa acá todos los descargos del «King»
«Me han ofrecido, a unos amigos les conté, mi hermano sabía, pero no es que puse un precio que se bajó. No he puesto nunca un precio. Llegan ofertas, pero no lo voy a vender todavía.
Seguro lo venderé, pero seguiré en lo mío, que es el fútbol. Estudiar para ser entrenador es algo que quiero, ayudar a las cadetes de la selección. Por eso he cambiado mi forma de pensar. Me siguen gustando, pero de qué me sirve tener una crianza si nos los veo», argumentó.
Luego, complementó diciendo: «No estoy gozando como quisiera, estoy metiendo mucha plata. Prefiero que vaya a otras cosas en lugar de desperdiciarla en algo que no estoy disfrutando. Esa es la verdad, lo diré cuando quiera hacerlo, pero no crean en lo que dicen. Varios van a decir que tengo problemas de plata, pero no entiendo. Yo me compré cosas, ¿acaso no las puedo vender? Cómo pueden ser tan tontitos. ¿Quieren que las queme, las regale o las sortee? Uno compra para vender también».
«Uno compra para en el futuro vender y comprar algo. Es inversión. Yo en el harás disfrutaba, pero lo veía de lejos. Ya son cinco años gastando mi fortuna y no los veo a los caballos. Voy a la selección y en un día libre no puedo ir. Cuando lo hice, fui en helicóptero porque no podía de otra forma. Me he sacado la cresta en el fútbol para tener mis cosas, pero no estoy disfrutando de la hípica. Aparte tengo un terreno gigante, de 50 hectáreas, pero no los puedo disfrutar y no me sirve tenerlos así. Prefiero estar aquí, disfrutar con ustedes y hacerlo bien», agregó.
Al cierre, reflexionó: «He regalado caballos a fundaciones de niños que los necesitan, son cosas buenas. De mi parte es difícil. Todavía me quedan, este año fui a remate y vendí 12 caballos. El otro año tengo otra generación, pero difícil. A Il Campione lo compré, dos que crié que están en Estados Unidos. Me di el lujo de ir a ganar allá. He hecho todo en la hípica, así que si sale otro sería maravilloso. Este año también, pero sí he perdido el amor de la hípica. Aparte me echaban para afuera cuando ganaba carreras».
