Universidad de Chile da vuelta la página de la eliminación de Copa Chile y ya empieza a planificar el 2023 con el objetivo de no volver a pasar los mismos inconvenientes de los últimos años, en los que peleó constantemente el descenso.
Tras la última fecha con Cobresal, la gerencia deportiva hará una poda importante en el plantel y buscará reforzar todas las zonas del campo con jugadores que vengan a realmente ser un aporte en el equipo.
Según informó TNT Sports, estos puestos serían un arquero que venga a competir el puesto con Cristóbal Campos, lateral izquierdo y derecho, un central de calidad en preferencia joven, un volante mixto y un delantero centro.
Para concretar esto, deberán desprenderse de sueldos altos como lo son: Junior Fernandes, Jeisson Vargas, Pablo Aránguiz, Ronnie Fernández, entre otros. Además, tendrá que existir una inyección económica importante para traer este tipo de incorporaciones antes mencionadas.
A todos estos refuerzos, se sumaría un DT, puesto que las últimas presentaciones de Sebastián Miranda al mando del equipo han decepcionado a la plana directiva y nombres como Sebastián Beccacece, Beñat San José y Ronald Fuentes, vuelven a asomar.