En medio del silencio absoluto que mantiene Alexis Sánchez sobre su reciente paternidad con la modelo rusa Alexandra Litvinova —con quien, según reportes, se habría convertido en padre recientemente— surge una hipótesis que reaviva la intriga sentimental del tocopillano: ¿fue su relación con la actriz Mayte Rodríguez su verdadero gran amor?
La teoría la lanzó con firmeza la periodista Cecilia Gutiérrez durante el podcast Bombastic, señalando que ese romance dejó una huella tan profunda que hoy explicaría el hermetismo de Sánchez respecto a su vida personal.
La historia no es menor: aquel vínculo entre Sánchez y Rodríguez, que se visibilizó con una controversial producción al estilo realidad televisiva en una isla —equiparado por Gutiérrez a un anuncio de boda real—, fue mediático, romántico y terminó de manera abrupta, dejando más preguntas que certezas en el ambiente del espectáculo chileno.
Lo que la periodista plantea es más que un recuerdo: para ella, ese capítulo marcó emocionalmente al delantero, tanto que su comportamiento reservado frente al embarazo de Litvinova —sin declaraciones públicas ni gestos notorios en redes— sería parte de una estrategia de protección emocional y distanciamiento del foco mediático.
¿Fue Mayte Rodríguez el gran amor?
Esa interpretación contrasta con la hiperexposición que marcó la relación con Rodríguez. En su momento, la pareja estuvo bajo el lente constante de la prensa, con planes de vida compartida e incluso rumores de convivencia y compromisos más serios.
Rodríguez, hija de la actriz Carolina Arregui, fue considerada por muchos una figura clave en la vida del delantero, y no pocos en el mundo del espectáculo siguen recordando ese vínculo como el más intenso y significativo de Sánchez antes de recalar en una relación mucho más discreta con Litvinova.
Hoy, con la paternidad consumada y el silencio de Alexis como telón de fondo, esta reconstrucción del pasado amoroso abre una nueva lectura sobre cómo viven los futbolistas sus romances lejos de las canchas.
La insistencia de columnas de farándula y análisis sobre su conducta sugiere al menos una cosa: cuando un corazón se expone al escrutinio público, las cicatrices del amor también se vuelven tema de debate nacional, y en el caso de Sánchez, el eco de Mayte Rodríguez sigue resonando más fuerte que cualquier declaración oficial.
¿Fue realmente Mayte el amor de su vida? Difícil saberlo con certeza, pero esa narrativa social ya forma parte del imaginario colectivo sobre el ícono futbolístico chileno cuando de amor y silencio hablamos.















