La empresaria e influencer Coté López decidió romper el silencio ante la ola de críticas que ha recibido por comenzar una relación con Lucas Lama Von der Forst, cuya vida pasada ha circulado con fuerza en redes sociales y medios.
En una serie de historias de Instagram, López reconoció que su pareja “metió la pata” cuando tenía 19-20 años, pero enfatizó que nunca estuvo en la cárcel y que no ha vuelto a tener líos con la justicia.
La controversia se originó cuando medios como La Cuarta y Lay Líderes 24 difundieron que Lama fue detenido en 2019 por tráfico ilícito de drogas.
En dicho operativo se le incautaron pastillas de éxtasis y hongos alucinógenos, y la causa habría culminado con una condena de 10 UTM y remisión condicional por dos años, cumplida en 2021.
Frente a estos antecedentes, López salió a la defensa, asegurando que su decisión de vincularse con él fue “informada”, y que lo que importa es la persona que Lama es “hoy”.
Coté López sale al paso y defiende a su pareja
En su declaración, la influencer también apeló al factor humano y al derecho a segundas oportunidades: “Es verdad que a los 19-20 años la cagó por meterse donde no debía”, dijo, pero agregó que “luego de eso nunca más en la vida tuvo algún problema con la justicia”.
Además, pidió un gesto de respeto hacia la familia de Lama, afirmando que “están pasándolo pésimo” con la exposición mediática. La llamada al resguardo familiar muestra que el conflicto no es solo de pareja, sino que implica una reflexión sobre la privacidad y responsabilidad mediática.
Pero más allá de la defensa personal, la situación plantea interrogantes: ¿hasta qué punto una figura pública puede validar su vínculo con alguien que suma antecedentes judiciales?
¿Y qué tan responsable resulta no advertir al público sobre dicha historia cuando la pareja se convierte en tema de interés general?
Coté López insiste en que no se trata de “una compra de bienes raíces” sino de afecto, y en que “no es un narco, ni un dealer”.
Sin embargo, la narrativa de los medios y las redes sociales ya circula, y el precio de esta exposición podría repercutir tanto en su marca personal como en la confianza que los seguidores depositan en ella.















