En una votación dividida, el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) tumbó la candidatura de Ximena Rincón: se quedó sin opción a tercer periodo en el Senado.
De este modo, la institución calificadora generó un golpe político en el Maule, pero al mismo tiempo transformó a la parlamentaria en seria aspirante para un futuro gabinete de la actual oposición.
Así, el Tricel rechazó la candidatura de Demócratas en el Maulo, impidiéndole postular a un tercer mandato consecutivo en la Cámara Alta.
La resolución vino a revertir lo aprobado por el Servel previamente y despejó el camino para otros aspirantes de centro izquierda.
La decisión fue adoptada por tres votos contra dos, tras la impugnación presentada por partidos del oficialismo y la Democracia Cristiana.
El argumento central: Rincón ya completó dos periodos consecutivos (2010-2018 y 2018-2026), lo que la Constitución prohíbe.
La senadora había defendido que su primer periodo no se contaba completo, ya que lo interrumpió en 2014 al asumir como ministra de Estado.
El Tricel, sin embargo, resolvió que ejerció más de la mitad del mandato, y por tanto, sí se considera válido para el límite constitucional.
Desde Demócratas acusaron un “criterio arbitrario” y advirtieron que la exclusión instala una doctrina electoral inédita, distinta a la del Servel.
Pese a las críticas, el fallo es definitivo y la deja sin opciones de competir en noviembre, obligando a su sector a reordenar sus cartas.
Así, el Tricel tumbó la candidatura de Ximena Rincón: se quedó sin opción a tercer periodo en el Senado.