El Fiscal Nacional Jorge Abbott puso en duda que las palabras del vocero de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, en que atribuye a esa organización el robo de madera con fines violentistas, asegura que su «prioridad es canalizar la violencia hacia el sabotaje», sirvan por sí solas para formalizarle una investigación.
«No basta pura y simplemente que alguien se atribuya o se autoatribuya alguna conducta para que inmediatamente el Ministerio Público pueda tomar una decisión de formalización de una investigación, que requiere muchos mayores antecedentes que esa simple declaración», precisó el jefe del Ministerio Público.
Ello, a solo días de que en medio del estupor que generaron las amenazas de Llaitul, el mismo Abbott enviara el recado a La Moneda indicando que para actuar se requería de una querella del Gobierno, la que fue ampliada, según su propia instrucción.
En sus nuevas declaraciones el jefe de la Fiscalía Nacional aseguró que esa entidad se encuentra investigando a Llaitul y que esta indagación podría, eventualmente, a que se adopten otras medidas.
«Se están realizando todas aquellas diligencias que se solicitaron en la ampliación de la querella, se ha encargado a la policía la realización de las mismas y estamos a la espera del resultado de aquellas para ver el curso que va a tener esa investigación», dijo.
A juicio de Abbott «la confesión en nuestro sistema procesal penal no tiene ningún valor, en términos de poder usarse en definitiva en contra de la persona. El Ministerio Público tiene que reunir antecedentes adicionales porque efectivamente el reconocimiento de un hecho respecto de una persona puede dar origen a que se decreten diligencias para poder establecer la existencia de ese hecho, y de la participación de la persona».
«Ahora hemos llevado adelante las investigaciones que están actualmente en curso y en algún minuto se tomarán las decisiones sobre el particular, pero no me puedo referir a las diligencias puestos que están sujetas a secreto», remató.