Luego de 34 años Chile se enfrenta a un nuevo y crucial Plebiscito. Hoy, a cuatro días del crucial acto republicano es hora de conmemorar lo que fue el Plebiscito del SI y el NO, revivir los sentimientos (para los mayores) y conocer cómo fue esa jornada del 5 de octubre de 1988.
Al respecto, el Abogado Magdiel Nicholls -especialista en derecho regulatorio- entrega tips históricos y legales de lo que significa para el país una jornada como la del próximo domingo 4, que será histórica para Chile.
El término Plebiscito proviene del latín “plebiscitum” que según la Real Academia de la Lengua Española se define como la ´consulta que los poderes públicos someten al voto popular directo para que apruebe o rechace una determinada propuesta sobre una cuestión política o legal´; es por tanto, dice el abogado «un procedimiento jurídico para la toma de decisiones de la materia consultada, ejercido por los ciudadanos, a través del derecho de sufragio».
Con sus propias y específicas particularidades, en el contexto de nuevas constituciones y en distintas épocas de nuestra historia republicana, se han realizado a lo menos seis plebiscitos.
En los los años 1812, 1818, 1925 y 1980, a los que se suman las consultas del régimen militar de los años 1988 y 1989, explica Magdiel Nicholls.
La consulta de 1988, tuvo lugar el 05 de octubre de 1988, tras una serie de movimientos sociales, y se realizó conforme a las disposiciones transitorias establecidas en la Constitución Política de la República de 1980 (27 al 29).
Hoy parece inaceptable -explica el abogado especialista- «pero esa consulta Buscaba dar continuidad o no al poder de Augusto Pinochet como Presidente de la República, estableciéndose 2 opciones claramente definidas: Un ´SI´ o un ´NO´ a fin de dar permanencia a la autoridad de la época o establecer un plazo concreto para su término» dijo el abogado a SintesisChile.cl.
Este proceso se caracterizó por la masiva participación ciudadana, alcanzando el equivalente al 97.53% de los ciudadanos habilitados para sufragar, lo que fue todo un récord. Con un universo electoral de casi 7.5 millones de personas.
Nicholls cuenta que para entonces existió una breve campaña electoral, que legalmente se extendió por 30 días previos al 5 de octubre.
Según esta mirada jurídica, en ese proceso «prevaleció la opción del NO, con un resultado del 54.70 % de los votos válidamente emitidos, resultado que fue respetado y que permitió convocar a elecciones presidenciales y parlamentarias, entregándose la conducción del país el 11 de marzo de 1990».
Para Magdiel Nicholls «el 15 de junio, mediante el Decreto 939 del Ministerio del Interior, fue convocado oficialmente el plebiscito de 1989, a realizarse el domingo 30 de julio de ese año -en lo que fue uno de los episodios electorales menos recordados hoy por los chilenos-, en dónde se sometieron a consulta 54 modificaciones a distintos Capítulos de la Constitución de 1980, en materias como las bases de la institucionalidad, derechos y deberes constitucionales, la presidencia de la República, los estados de Excepción Constitucional».
«Además, se incluyó , la composición del Congreso Nacional y la formación de leyes. El universo electoral habilitado superaba los 7.5 millones de personas y se dispusieron 23.000 mesas de sufragio».
Como se sabe, esta propuesta fue consensuada entre la clase política representada en los respectivos partidos de la época, con excepciones. El resultado fue de 91,25 % por la aprobación al proyecto de reforma propuesto y 8,74 % por el rechazo».
Lo que Chile enfrentará este domingo
El 04 de septiembre del presente año, el “plebiscitum” volverá a hacer gala de su objetivo, buscando en esta oportunidad, determinar si la ciudadanía está de acuerdo o no con la propuesta de Constitución Política de la República redactada por la Convención Constitucional, razón por la cual se le ha denominado a este proceso como “plebiscito de salida”.
«Esta propuesta nace del Plebiscito Nacional 2020, y del acuerdo de la mayoría de los partidos políticos, denominado “Acuerdo por la paz y la nueva Constitución”, tras un mes de protestas en todo el país, aprobándose la idea de reemplazar la actual Constitución, a través de una Convención Constitucional electa por la ciudadanía», comenta.
Y añade que «el proceso parece responder a una demanda ciudadana transversal, cuyo génesis se encuentra en las movilizaciones sociales. No obstante existen diferencias sustanciales, dados principalmente por el contexto político imperante, las restricciones sanitarias producto de la Pandemia Covid-19.
Esta vez el sufragio es obligatorio «para quienes tengan domicilio electoral en Chile y tengan 18 años o más”, estableciéndose adicionalmente un procedimiento y multas por su incumplimiento, a fin de dar una mayor legitimidad de participación ciudadana y evitar la abstención, lo que marca un cambio respecto de los eventos precedentes.