El ministro del Interior, Alvaro Elizalde cerró la puerta a feriado el 17 de septiembre y desencadenó la ira de parlamentaria.
De esta forma, la decisión del Gobierno echó por tierra la idea impulsada por la diputada Camila Musante, acusando efectos negativos en la economía.
Elizalde rechazó tajantemente la posibilidad de tener feriado el próximo 17 de septiembre.
Si bien la facultad de establecer feriados corresponde exclusivamente al Presidente de la República, la idea fue promovida en el Congreso por Musante (Ind. pro Comunes).
La parlamentaria incluso había llamado al Ejecutivo a respaldar su moción.
Desde la oposición, sin embargo, la iniciativa fue calificada como populista, con el diputado Jorge Alessandri (UDI) acusando un trasfondo electoral.
En tanto, el parlamentario de RN, Frank Sauerbaum, sugirió disminuir en cuatro los feriados oficiales para aumentar en igual número los días de vacaciones legales.
Pero Elizalde cerró definitivamente la discusión insinuando que sería irresponsable aprobar la ley sin una discusión abierta y con más plazo.
“Hemos sido claros en que no se puede estar legislando sobre la base de la improvisación y todos sabemos el impacto que eso tiene en la economía”, sostuvo.
Agregó que el foco debe estar en mantener la senda de crecimiento económico impulsada por el gobierno.
“Hoy día los esfuerzos tienen que estar concentrados en mantener la senda de crecimiento que se ha restablecido con la gestión del Presidente Boric.
Lejos de abandonar la discusión, la diputada Musante propuso ahora decretar feriado el sábado 20 de septiembre, argumentando que los trabajadores del comercio retornarían a sus labores demasiado pronto tras las celebraciones, reduciendo así los días de descanso.
El ministro del Interior, Alvaro Elizalde cerró la puerta a feriado el 17 de septiembre y desencadenó la ira de parlamentaria.