Y es que uno de los chistes que más llamó la atención del público, fueron los coqueteos que lanzó a la actual pareja de Carmen Gloria Arroyo.
“¿Han visto al pololo? que Dios me lo bendiga, que la virgen del Carmen me lo proteja con el manto sagrado y que las lagrimitas del niño Jesús lo limpie de pecado. Le falta el Ketchup noma’”, dijo en su presentación.
“¿Por qué no me aliñai’ la malaya?, oye Berni… ¿por qué no me fileteai’ el lomo vetado”, lanzó en la tercera noche del festival.
Bernardo Borgeat se refirió a su rutina
Al ser consultado por Radio Biobio sobre estas tallas «subidas de tono», aseguró que si bien, agradeció la mención, encontró que “fueron un poco fuertes los piropos (…) de repente estuvieron un poquito pasaditos”.
Y este miércoles Belén se encontró cara a cara con Bernardo en el capítulo de Échale la culpa a Viña, espacio que conduce la abogada.
“No me pellizque la uva (…) como que se le pasó la mano con mi cabrito…”, partió diciendo Carmen Gloria antes de hacer entrar a su pololo al estudio montado en el hotel.
Belén salió del paso bromeando: “yo lo admiró profundamente, lo respeto, con todo respeto le digo, una mujer bien alimentada, dieta keto, buen pedazo de carne tiene ahí”.
Ya todos en el programa, revisaron juntos la rutina, momento en que el argentino entregó sus impresiones.
“Belén, gracias igual por mencionarme (…) Igual es lindo también que a uno lo nombren y lo piropeen, te pasaste ahí un poquito con el chimichurri, pero, seguramente pronto…”, comentó Bernardo.
Belén entonces comentó que “Supieras las tallas que dije afuera, wachito”, sacando carcajadas de todos los presentes.
“Me imagino, me imagino”, respondió entre risas Borgeat, quien luego ofreció un asado a Belén y su equipo.