Pago biométrico en transporte público santiaguino: Así funciona el plan piloto que aspira a tecnificar el pago de pasajes.
La Red Metropolitana de Movilidad de Santiago, anteriormente conocida como Transantiago, ha iniciado un plan piloto para implementar control biométrico mediante reconocimiento facial en los buses urbanos.
Este sistema busca no solo facilitar el pago del pasaje, sino también combatir la evasión.
En los casi 20 años desde su implementación, el sistema de transporte capitalino ha experimentado importantes avances tecnológicos.
Sin embargo, la evasión sigue siendo un problema estructural que provoca pérdidas estimadas en 50 millones de dólares mensuales, cubiertas por subsidios estatales.
Pago biométrico en transporte público
Según el MTT, entre enero y junio de 2025 se registraron 330 millones de validaciones de pasajes, el 4,7% más que en el mismo periodo de 2024.
Durante las 283.000 fiscalizaciones realizadas, se detectaron 27.000 pasajeros sin pagar y 2.000 que hicieron mal uso de beneficios como la Tarjeta Nacional Estudiantil (TNE) y la Tarjeta Adulto Mayor (TAM).
El ministro Juan Carlos Muñoz destacó la mejora en las cifras, pero reconoció que se debe avanzar más.
“Estamos impulsando un proyecto de ley para endurecer las sanciones a los evasores», dijo.
Añadió que «también estamos explorando nuevas medidas tecnológicas para seguir fortaleciendo Red de Movilidad”, señaló.
¿Cómo funciona?
El nuevo sistema biométrico consiste en la instalación de cámaras en puntos estratégicos de los buses, conectadas a un sistema computacional que identifica a los pasajeros mediante reconocimiento facial.
Este método se suma a los actuales sistemas de pago con Tarjeta Bip! y código QR, y permitirá prevenir fraudes en el uso de beneficios y mejorar el control de incivilidades.
El plan piloto se aplica inicialmente en cinco buses del recorrido 406, operado por la empresa MetBus.
Participan voluntarios previamente enrolados, cuyos rostros son registrados para ser reconocidos por las cámaras al ingresar al bus.
El Gobierno ha indicado que tecnologías similares se utilizan en Río de Janeiro (Brasil) para controlar el uso de beneficios tarifarios.
También está presente en Moscú (Rusia), donde el reconocimiento facial permite pagar el metro sin contacto físico.
Junto con la tecnología, se estudia una ley conocida como “Paga tu Pasaje”, que incluiría una tarifa recargada para quienes sean sorprendidos evadiendo.
Esta se pagaría de inmediato para evitar multas mayores. Además, se analiza restringir el acceso a eventos deportivos o a trámites oficiales para quienes figuren en un registro de evasores reiterados.
Pago biométrico en transporte público santiaguino: Así funciona el plan piloto.