El Gobierno ingresó durante esta jornada la reforma tributaria a la Cámara de Diputados, con la cual pretende recaudar 4,1 puntos del Producto Interno Bruto (PIB) en régimen.
El texto sostiene que “el aumento en la tributación de las personas será destinado a la ampliación del Estado de Bienestar”.
Del incremento total proyectado, 2,9 puntos del PIB serán destinados a dos profundas reformas comprometidas a la Administración: al sistema de pensiones y al sistema de salud.
Para dar respuesta a las falencias a la desigualdad de distribución de los cuidados especialmente en niños, ancianos y personas con dependencia, cerca de 0,3 puntos del PIB serán destinados a fortalecer un nuevo Sistema Nacional de Cuidados
Junto con lo anterior, la reforma permitirá también avanzar en la realización de otros derechos sociales. Cerca de 0,4 puntos del PIB recaudados serán destinados a políticas de educación.
En tanto, 0,7 puntos del PIB serán destinados a políticas productivas y de investigación y desarrollo que otorguen dinamismo a nuestra estructura productiva, considerando que un porcentaje importante sea decidido de manera descentralizada.
También habrá medidas para combatir la crisis climática y para contribuir a un acceso equitativo a la ciudadanía, como vivienda y transporte, y a potenciar la inversión en cultura.
En cuanto a las regiones, se afirma que existe una deuda en respecto al volumen como a la autonomía en el uso de recursos. Parte de la reforma dice relación con aumentar significativamente los recursos para las regiones, como condición necesaria para lograr una descentralización fiscal efectiva.
La reforma tributaria es esencial para financiar responsablemente otras reformas estructurales que siguen pendientes. Así, se espera que la reforma tributaria financie cerca de la mitad del programa de Gobierno.